CIENCIA Y TECNOLOGÍA

Comercio de medicamentos ilegales daña la salud y economía

ROCIO CASTAÑEDA - 09 / 05 / 2025
Comercio de medicamentos ilegales daña la salud y economía

Ante las diversas afectaciones ocasionadas por la venta de medicamentos falsificados y caducos en el comercio informal, es necesario concientizar a la población sobre el riesgo que corre su salud y vida, al no comprar en lugares autorizados

La venta de medicamentos ilegales y falsificados como aspirina, ibuprofeno, paracetamol, antiinflamatorios, vitaminas, suplementos alimenticios, antihipertensivos, metformina, e incluso insulina, ha mostrado un significativo crecimiento en México, lo cual representa un grave riesgo para la salud pública, alertan investigaciones de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), Unidad Zacatenco, del Instituto Politécnico Nacional (IPN). La titular del Laboratorio de Biofarmacia de la ENCB, Sandra García Medina, señaló que, según cálculos, para el cierre de 2023 el valor del mercado de fármacos ilegales superaría los 32 mil millones de pesos, un aumento de 78 por ciento con respecto a 2019. Cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican anualmente más de 700 mil defunciones en el orbe por el consumo de este tipo de medicina, mientras en nuestro país se calcula que 6 de cada 10 fármacos ofrecidos en tianguis y lugares no autorizados son robados, están caducos o son falsificados, lo que pone en peligro a casi 8 millones de personas que podrían ser víctimas de este mercado. Asimismo, las alertas sanitarias sobre fármacos de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) contabilizan 134 desde marzo de 2020, en comparación con las 19 emitidas entre 2017 y 2019.

Comercio de medicamentos ilegales daña la salud y economía
Comercio de medicamentos ilegales daña la salud y economía

LAS CAUSAS

La doctora Sandra García explicó que el aumento en la venta de medicamentos ilegales se debe a varios factores: el incremento en los precios, que derivan en la búsqueda de alternativas en el comercio informal, además de la creciente demanda –65 por ciento– de vitaminas y suplementos, lo que impulsa las ventas ilícitas. Indicó que esta problemática también se ha convertido en una actividad rentable, ya que los castigos son menores en comparación con otros delitos, además de que “las ganancias anuales son superiores a 11 mil 500 millones de pesos por la venta ilegal de fármacos, lo que también repercute en la industria farmacéutica legal”. La especialista politécnica destacó que ante el crecimiento constante y preocupante por las implicaciones económicas y para la salud pública que representa esta problemática, es esencial la colaboración entre el gobierno, la industria farmacéutica y la sociedad civil para reducir este fenómeno.

LOS RECORRIDOS Y MUESTREOS

Con el objeto de evaluar la calidad de los medicamentos que están a la venta en tianguis o afuera de algunas estaciones del Metro, estudiantes de la licenciatura de Químico Farmacéutico Industrial de la ENCB Zacatenco acuden a esos lugares con la finalidad de identificar el tipo de fármacos que se ofrecen y obtener una muestra de ellos para analizar sus características y efecto terapéutico. Durante esos recorridos, se ha detectado que este tipo de fármacos están a la venta tanto en lugares no establecidos de la Ciudad de México, por ejemplo, Tepito; así como en Nezahualcóyotl, Estado de México, además de Guadalajara, en donde se reporta una industria importante de medicamentos de fabricación ilegal.

A través de esos muestreos, en el Laboratorio de Biofarmacia del IPN se detectaron productos falsificados, caducos y algunos con registro y lote, pero en condiciones no adecuadas porque están expuestos a la humedad, a altas temperaturas y otros factores que modifican su eficiencia.

“Tenemos que concientizar a la población sobre los riesgos y demostrarle con estudios lo que hemos encontrado en este tipo de medicamentos, que no tienen la cantidad de fármaco requerido ni el proceso correcto de liberación y disolución para lograr el efecto terapéutico. Con esas características asumimos que son fármacos de mala calidad y pueden provocar otros problemas a la salud”, resaltó García Medina.

PRUEBAS EN LABORATORIO

Para evaluar la calidad de los fármacos en general, estudiantes y un equipo de colaboración de la ENCB Zacatenco, como la maestra en Ciencias Lucero García Medina, realizan pruebas de calidad general (perfiles de disolución), que proporcionan una base científica para valorar la eficacia y seguridad de los productos farmacéuticos, con el objetivo de proteger a las y los consumidores.

La importancia de estos perfiles radica en que proporcionan información sobre la liberación del principio activo de un medicamento e identifican si cumple con las especificaciones necesarias para ser considerado seguro y efectivo, lo cual es relevante en mercados informales donde la calidad puede variar. Estos análisis son utilizados con un método de control de calidad para verificar la consistencia entre lotes de producción, además de que la comparación de perfiles de disolución, bajo ciertas condiciones, pueden sustituir las pruebas de bioequivalencia, lo cual es importante porque permite a los reguladores determinar si un medicamento genérico puede ser intercambiado por el innovador sin comprometer la salud del paciente. “Esto es fundamental para demostrar los riesgos a la salud por adquirir medicinas en lugares no autorizados, cómo se utilizan y también cómo se desechan, por lo que es necesario concientizar a la población sobre este fenómeno”, advirtió la especialista Sandra García Medina. Además subrayó que no tienen la cantidad de fármaco que se requiere y tampoco el proceso de liberación y disolución esperado para lograr el efecto terapéutico deseado.

Reconoció que no siempre hay posibilidades de adquirir medicinas de patente, pero está la opción de los fármacos genéricos, que cumplen con las pruebas de intercambiabilidad, por lo que se puede garantizar su eficacia y seguridad. La docente politécnica comentó que, aunque la venta ilegal de fármacos no es un problema exclusivo de México, ya que también se presenta en países de primer mundo, en donde la venta es principalmente por internet, es fundamental reforzar las acciones para proteger el bien público que representan los medicamentos.

Indicó que, aunque las autoridades realizan un relevante trabajo de vigilancia y llevan a cabo decomisos importantes, es fundamental como sociedad evitar la compra de estos productos en lugares no autorizados.

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