El Instituto Politécnico Nacional (IPN), la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI) y los Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (PILARES) inauguraron el Zócalo de las Ciencias, un nuevo espacio ciudadano donde la ciencia y la cultura se encuentran, para convertir la plaza más emblemática del país en un punto de encuentro mensual para la divulgación científica.
El Zócalo capitalino se convirtió en un escenario vibrante donde las flores de cempasúchil, las calacas monumentales de la Megaofrenda del Día de Muertos y el conocimiento científico se dieron la mano. La finalidad de esta iniciativa inédita es para acercar la ciencia, la tecnología y la innovación a las familias de la Ciudad de México.
El evento reunió a instituciones académicas, museos, asociaciones civiles y busca consolidarse como un encuentro permanente de divulgación, que se realizará cada último viernes de mes, para fomentar el acceso al conocimiento y despertar vocaciones científicas en todas las infancias.
En representación del IPN, estuvieron presentes la secretaria de Investigación y Posgrado, Martha Leticia Vázquez González, el encargado de la Dirección de Difusión de Ciencia y Tecnología (DDiCyT),
Edmundo Omar Matamoros Hernández y el Director de Investigación, José Nicolás Fernández García. “El Zócalo de las Ciencias es una iniciativa del Gobierno de la Ciudad de México que busca abrir un espacio para que la sociedad se acerque a la ciencia. Para el IPN es fundamental ser parte de estas actividades porque nuestro compromiso social es acercar la ciencia a la sociedad”, aseguró la doctora Martha Leticia para la Agencia Informativa Conversus (AIC).
Por su parte, el doctor Fernández García agradeció a la comunidad politécnica que colabora en estos proyectos de llevar la ciencia politécnica a las calles. “Sin ellos no podríamos dar estos alcances. Es fundamental que den a conocer la ciencia que realizan y el impacto que tiene en nuestra sociedad”, añadió.
Las autoridades politécnicas destacaron que este tipo de espacios reflejan el compromiso del IPN con la educación pública, la vinculación social y la democratización del conocimiento, al tiempo que invitan a las nuevas generaciones a imaginar futuros desde la ciencia.
El titular de la SECTEI, Pablo Enrique Yanes Rizo, subrayó que el Zócalo de las Ciencias se realizará cada viernes último del mes, lo que coincide con los días de Consejo Técnico Escolar, para aprovechar el espacio y fomentar actividades educativas, recreativas y experimentales.
Además, con el objetivo de que “la ciencia deje de ser un privilegio y se convierta en un derecho”, como lo puntualizó el coordinador General del Subsistema de Educación Comunitaria PILARES, Javier Ariel Hidalgo Ponce, ya que este proyecto simboliza un cambio de paradigma y busca integrar la vida pública, familiar y comunitaria de todos los capitalinos.
“Los padres de familia podrán venir al Zócalo para encontrar un lugar de aprendizaje y conocimiento, sobre todo, para despertar la curiosidad de los niños ante los fenómenos de la vida y acercarlos más al conocimiento”, afirmó.
En representación de la divulgación civil, la editora de la revista Chema Tierra, Deyanira Almazán Medina, indicó la importancia de fortalecer los puentes entre los científicos, los museos y la sociedad para enfrentar los retos del cambio climático, la tecnología y el pensamiento crítico.
La primera jornada del Zócalo de las Ciencias incluyó talleres de Astronomía, Física, Biología y Robótica de sociedades civiles, el Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental de la CDMX, el Museo Interactivo de Economía (MIDE), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), las Utopías de la Alcaldía Iztapalapa y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El IPN proyectó funciones de astronomía en el Domo Móvil de la DDiCyT, se impartieron talleres de astronomía, se instalaron telescopios equipados con filtros polarizados para la observación solar donde colaboró la Sociedad Astronómica de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura (ESIA), Unidad Ticomán.
Los visitantes disfrutaron de experimentos interactivos, observaciones con telescopios y actividades inspiradas en la relación entre ciencia, cultura y tradiciones mexicanas.
El ambiente festivo y educativo demostró que la divulgación científica puede integrarse con las celebraciones culturales, para reforzar la idea de que la curiosidad también florece entre las ofrendas.
Con esta primera edición, el Zócalo de las Ciencias se consolida como una plaza del conocimiento, un espacio público gratuito, incluyente y permanente que busca democratizar el acceso a la ciencia, inspirar a las juventudes y fortalecer la educación científica en la capital del país.
Este proyecto refrenda una visión colaborativa de la ciencia de poner “La Técnica al Servicio de la Patria” a través de transformar espacios con riqueza científica y cultural; y así la educación, la curiosidad y la colaboración tejen el punto de partida para el acceso al conocimiento de tod@s y formar semilleros de infancias que evolucionen en los próximos investigadores mexicanos.